7 aspectos sobre la crianza en los que los padres deben estar de acuerdo

Cada madre o padre aborda la crianza infantil de una manera diferente. No solo repercute la educación que cada uno ha recibido, sino también las creencias, objetivos y prioridades que se tienen respecto a la crianza de los hijos. De ahí que a menudo muchos padres tengan puntos de vista diversos sobre cómo abordar determinados aspectos de la educación infantil. Se trata de un fenómeno mucho más común de lo que pensamos y que, en la mayoría de los casos, no tiene mayores repercusiones en el crecimiento de los niños. 

Sin embargo, hay ocasiones en los que las discrepancias de los padres respecto a determinadas cuestiones de la crianza infantil pueden generar problemas en el núcleo familiar e inseguridades en los niños. En estos casos, es importante que ambos padres se sienten a hablar y se pongan de acuerdo sobre cómo abordar estos aspectos para evitar generarles problemas a sus hijos que puedan arrastrar toda la vida. 

Los principales detalles sobre la crianza de los hijos que debes conciliar con tu pareja

Lo ideal es que ambos padres estén de acuerdo en todos los aspectos relacionados con la crianza infantil, pero seamos realistas, esto no siempre es posible. Es normal que existan discrepancias sobre determinados aspectos en los que, incluso, los padres decidan actuar de manera independiente sin que esto afecte el desarrollo infantil. Sin embargo, existen algunos aspectos en los que es fundamental trabajar las diferencias ya que, de lo contrario, podrían afectar a los más pequeños de casa. Estos son los puntos en los que debes ponerte de acuerdo con tu pareja, sí o sí.

1. Alimentación infantil

La alimentación infantil es uno de los temas críticos sobre los que los padres deben llegar a un acuerdo ineludible. Es importante que determinéis el tipo de alimentación que seguirán los niños, así como los alimentos que están permitidos y los que no y los horarios de alimentación. Si tenéis puntos de vista diversos, intentad llegar a un punto intermedio en el que se comprendan los aspectos más beneficiosos para los niños. De esta manera, evitaréis que mientras uno le prepara comida saludable el otro le compre bollería industrial y alimentos ricos en azúcares, un problema que no solo afecta la salud de los pequeños, sino que les transmite una idea confusa sobre lo que pueden o no comer.  

2. Sueño infantil

Otro de los temas sobre los que debéis poneros de acuerdo es sobre las rutinas y horarios de sueño infantil. El sueño es un hábito fundamental en la vida de los niños ya que, además de ayudarles a reponer energías, estimula su crecimiento y favorece la desintoxicación de su cuerpo. Por eso, es importante que tengan una rutina organizada y estable de sueño que favorezca el descanso infantil y permita que duerman al menos 8 horas diarias, según la edad. Para ello, es fundamental que acordéis el horario de ir a la cama cada día, así como las rutinas previas a la hora del sueño. De esta manera, ambos estaréis de acuerdo en si los niños pueden usar o no las pantallas antes de ir a la cama o si deben acostarse a las 21:00 o las 22:00 horas.

3. Conciliación familiar 

La conciliación familiar es fundamental para mantener un buen equilibrio en el hogar. Sin embargo, para que exista una conciliación real ambos progenitores deben distribuir la carga de tareas y responsabilidades equilibradamente. Y, para ello, es necesario llegar a un consenso en el que se definan los roles que ejecutará cada uno, así como las responsabilidades que afrontarán y las actividades diarias. Obviamente, esto no significa que uno no cuente con el apoyo del otro o que no exista flexibilidad, pero es importante hablar y llegar a un acuerdo sobre las cargas familiares para evitar que uno de los dos termine sobresaturado.

4. Educación y escolarización infantil

Otro de los temas esenciales sobre los que debéis poneros de acuerdo es sobre la educación y escolarización infantil. Independientemente de vuestros puntos de vista sobre este tema es importante que lleguéis a un consenso sobre a qué edad escolarizaréis a los niños, qué tipo de educación queréis brindarles, en qué tipo de colegio queréis inscribirlos o en qué materias extraescolares queréis formarlos. De esta manera, no solo podéis aunar fuerzas para brindarles una mejor educación a vuestros hijos, sino que evitaréis discusiones innecesarias en momentos críticos como cuando tengáis que elegir colegio.

5. Rol de la familia

El rol de la familia en la crianza infantil suele ser motivo de discusión habitual en muchas parejas. Es el típico caso en el que a uno de los progenitores le parece bien dejar a los niños bajo el cuidado de los abuelos cuando van de viaje mientras que el otro prefiere llevar a los peques con ellos o del padre que le parece bien que las abuelas mimen a sus hijos mientras que la madre prefiere que no lo hagan de manera unilateral. El resultado suele ser una acalorada discusión que podía haberse evitado si se hubiese llegado a un acuerdo previo. Por eso, es importante que lleguéis a un consenso sobre el rol que tendrá cada miembro de la familia en la crianza infantil, así como los límites que no deberán traspasar. Teniendo esto en claro, podéis afrontar este tipo de situaciones más fácilmente.

6. Valores a inculcar

Si hay un tema en el que los padres deben ponerse de acuerdo es sobre los valores que quieren inculcar a sus hijos. Es importante que os sentéis a hablar sobre cuáles serán los cimientos morales y éticos sobre los que educaréis a vuestros hijos y, en base a ello, establezcáis una estrategia común para fomentar esos valores desde una edad temprana. Si estáis de acuerdo en que queréis enseñarles a ser honrados es fundamental que les eduquéis con el ejemplo y ambos les recriminéis si en algún momento vuelven a casa con algo que no es suyo. Esto no solo facilitará muchísimo la crianza infantil, sino que evitará enviar mensajes contradictorios a los niños a medida que crezcan. 

7. Normas en el hogar

Las normas en el hogar no solo contribuyen a mantener el orden en casa, sino que les brindan seguridad a los niños. Cuando los pequeños tienen claro lo que pueden o no hacer pueden actuar con más confianza y discernir entre lo que está bien o mal. Sin embargo, si no cuentan con reglas claras, no podrán saber cómo comportarse y esto les generará una gran inseguridad. Por eso, es importante que lleguéis a un acuerdo sobre cuáles serán las normas en el hogar y que ambos las hagáis cumplir, independientemente de si está el otro progenitor delante o no. Así, les estaréis transmitiendo a los niños un mensaje claro que les generará confianza.